Compartir es una oportunidad con la que puedes interactuar con los demás. Es un sentimiento de felicidad y que te regocija pero más que todo, es un momento que te llena de sentimientos.
Esta semana pude tener una experiencia invaluable e inolvidable. Gracias a Olimpiadas Especiales Panamá y a uno de los patrocinadores de los III Juegos Latinoamericanos de Olimpiadas Especiales, HerbaLife, pude estar en Panamá.
Mi travesía comenzó el domingo 23 de Abril desde Graz, Austria donde estaba representando a mi país en el 2017 Ströck ATUS Graz Trophy. Después de terminar mi competición, me dirigí directamente hacia el aeropuerto para así tomar el avión hacia Panamá. Después de alrededor de 20 horas de viaje, llegué al siguiente día, lunes, a las 5:00 p.m. a mi bello país.
Al día siguiente, en la mañana, fui directamente a la Piscina Eileen Coparropa en la Ciudad Deportiva Irving Saladino para poder compartir un tiempo con alrededor de 120 atletas de natación de diferentes países de Latinoamérica. Al llegar a la actividad, todo fue muy especial, desde el recibimiento de las personas encargadas, voluntarios hasta los atletas donde pude sentir el calor y la alegría de compartir conmigo.
Esa mañana, más que dictar una clínica, pude conversar con todos ellos, compartir y sentirnos identificados mutuamente con la felicidad de poder estar en Panamá y a la vez también identificarnos con ese sentimiento de dar lo mejor de ti y poder representar dignamente a tu país.
Mientras conversábamos, ellos compartían conmigo qué tan agradecidos ellos estaban con sus padres, entrenadores y todas las personas que lo apoyaban en sus entrenamientos y competencias. Algo con la que me siento muy identificado con ellos.
También, otros atletas, me enseñaban más que sus habilidades de poder nadar y competir por su país, me enseñaban sus otros talentos:
¡Talento en el deporte y en el canto! 🏊🎤🎶❤️ ¿Qué tal esta belleza?😍🇵🇦 #JuegosLatamOE @oepanama @OEamericalatina pic.twitter.com/PD3usoZCzy
— Deportes RPC (@deportesrpc) 25. April 2017
Sin duda alguna, puedo decir que más que talento, tenemos un pensamiento en común: la búsqueda de nuestros sueños, luchar y no ponernos límites en lo que queremos lograr.
Dos días después, exactamente, jueves en la mañana, nuevamente pude compartir directamente con los atletas y sus entrenadores en una “Experiencia Unificada de Natación”, en donde se tenía programado hacer un relevo, que al final, fue tan divertido que nosotros mismos hicimos más. Pudimos convivir entrenadores/atletas y poder competir todos juntos en esta actividad entretenida.
Siempre escogeré vivir experiencias sobre cualquier otra opción y esta experiencia que viví en conjunto con estos héroes, que no se ponen límite en absolutamente nada, es invaluable para mí.
¡Mil gracias Olimpiadas Especiales Panamá y HerbaLife por la invitación a este exitoso evento!